En el día de ayer, la consejera de Turismo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Yaiza Castilla recabó el apoyo de la patronal turística para trabajar por la reapertura del sector en las islas aunque dice que con condiciones como “la trazabilidad del cliente y que existan pruebas y test para los turistas en origen y en el destino canario”
Tal y como señalan en su página web, la consejera de Turismo, Industria y Comercio mantuvo en la mañana de ayer un encuentro con los presidentes y presidenta de las patronales del sector turístico. En concreto estuvieron presentes, vía videoconferencia, Susana Pérez, de la Asociación Insular de Empresarios de Hoteles y Apartamentos de Lanzarote (Asolán); Jorge Marichal, de la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel); Antonio Hormiga, presidente de la Asociación de Empresarios Turísticos de Fuerteventura (Asofuer) y José María Mañaricúa, de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT).
La reunión fue convocada por Castilla para compartir información actualizada de la situación de las empresas del sector y coordinar acciones en relación a la futura apertura de hoteles y apartamentos en las Islas tras el periodo de confinamiento y, según la nota de prensa, “todas las partes estuvieron de acuerdo en que esta apertura no se realice hasta que no se den suficientes garantías de seguridad sanitaria por ambas partes -cliente y destino-, por lo que el sector prefiere esperar y no correr para abrir sus hoteles si esta situación no está contemplada, pues hacer lo contrario supondría volver a poner en peligro frente al Covid-19”. “Prudencia y no correr”, fueron al respecto las palabras empleadas por los representantes de las patronales.
La consejera expuso a los tres presidentes y presidenta de las entidades que aglutinan al sector alojativo, que “ya se está trabajando desde el Gobierno en el rediseño de procesos de toda la cadena de valor de la actividad turística”. “Los equipos de trabajo que permitirán crear los protocolos para cada servicio, minimizando cualquier riesgo con el fin de transmitir seguridad sanitaria, ya se están configurando y esperamos poder desarrollar este trabajo en el mes de mayo para a partir de junio próximo empezar a implantar la estrategia”, anunció.
No obstante, advirtió la “absoluta necesidad de la trazabilidad del cliente de forma que garanticemos que haya pruebas y test en destino y pruebas y test en origen. Es una acción recíproca”, dijo, “ y una vez ésto esté garantizado podremos abrir, porque ya se habrán implementado los nuevos procesos de seguridad en toda nuestra cadena de valor” .
Desde la consejería también aseguran que “esta propuesta se hará con la implicación del sector empresarial y la participación de profesionales de cada uno de los servicios prestados a los turistas, desde su llegada al aeropuerto, recogida, transporte hasta el hotel (taxis y guaguas), recepción e identificación en el hotel, estado de las habitaciones y procesos de limpieza de las mismas, control de alimentación y bebidas, medidas de distanciamiento social (aforos en restaurantes, bares, etc..), uso de hamacas, excursiones, ocio nocturno, alquiler de coches, y un largo etcétera de puntos de contacto”.
La patronal aprovechó también para solicitar la intermediación del Gobierno de Canarias frente a los turoperadores para agilizar los pagos pendientes desde el inicio del año con los empresarios canarios, ya que se está restando liquidez las empresas, y que de paso el gobierno autonómico traslade a las corporaciones locales que le agilicen los permisos para acometer obras de rehabilitación y mejora aprovechando el cierre turístico de estos meses.
Una encuesta sobre la reapertura
En otro orden de cosas, la Consejería regional de Turismo ha realizado a través del Observatorio Turístico de Canarias una encuesta con los establecimientos alojativos sobre los planes que manejan tras el periodo de confinamiento. La encuesta, a la que han contestado de momento 239 establecimientos hoteleros y extrahoteleros de todas las islas, con una oferta conjunta de unas 56.000 plazas, muestra que mayoritariamente el sector se decanta por no abrir por lo menos en los meses inmediatos al desconfinamiento.
Concretamente los datos recabados por el Observatorio Turístico dependiente de la Consejería muestran que tan solo un 26% de los alojamientos tendrían intención de abrir y un 74% no la haría, siendo mayoritaria la respuesta de que no sabe la fecha pero no será antes de tres meses.