En 1933 se aprobó por consenso la Ley de Vagos y Maleantes en las Cortes Republicanas, conocida popularmente como “la gandula”. La ley podía ser usada para sancionar comportamientos que, sin ser delictivos, eran inconvenientes o mal vistos por la sociedad. Ya en 1934 se propuso la construcción de dos “colonias penales” en las islas, una en Lanzarote y la otra en El Hierro, donde se enviarían reclusos de toda España bajo el amparo de esta Ley. La creación de estos campos de concentración fue acogida con horror por las posibles víctimas, en una época en la que el hurto para subsistir, el desempleo o la mendicidad eran muy comunes. Entre los opuestos a estos “campos de concentración y trabajos forzados” estaba Eliseo Jerez, subdirector de la Prisión Provincial de Las Palmas de Gran Canaria. Este gomero, a través de varios artículos periodísticos, se posicionó en contra de estas colonias penitenciarias, por lo que fue expedientado, y suspendido de empleo y sueldo. Finalmente no se iniciaran estos centros en Canarias, y volvió a ser readmitido a su puesto, no sin cierta demora.
Eliseo Jerez Veguero había nacido en San Sebastián de La Gomera el 7 de Octubre de 1898. Cursó estudios de Derecho en La Laguna, que amplio en Barcelona y Madrid, donde estudió criminología. Durante años fue articulista de varios periódicos canarios como “El Progreso” o “La Tarde”. Entró en el cuerpo de funcionario de prisiones, y en Julio de 1924 se hizo cargo de la dirección de la Prisión Provincial de Tenerife, de forma accidental en varias etapas, y siendo subdirector de la misma en otros periodos.
En 1927 publicó su primer libro “De la vida penal y de la vida Social”. Tras viajar de nuevo a Madrid, en 1928, es destinado a la Prisión Central de Burgos y posteriormente a la de Soria, siendo relevado para su inclusión en la Comisión de Compras Central de Prisiones en 1932. Llegó a participar, en representación de España, en varios congresos mundiales de prisiones.
En marzo de 1937, ya bajo el gobierno falangista, es separado de nuevo de su cargo, al ser acusado por su pertenencia a las logias masónicas “Andamiana” de Gran Canaria y “Añaza” de Tenerife.
A partir de aquí comenzó a ejercer la abogacía, tanto en Tenerife, como en Gran Canaria, y publicó varios libros: “De la vida” (1951), donde recopilaba muchos de sus artículos en la prensa isleña, y “Del pensar y del sentir ajeno” (1958). Fue premio “Leoncio Rodríguez”.
Eliseo murió en Madrid en Diciembre de 1976.
Muy interesante el artículo sobre mi tío Elíseo Jerez,aunque con algunos errores sobre fechas. Felicito a su autor,pues al fin fin hay alguien que se ha ocupado de dar a conocer a personajes de la familia Jerez Veguero que como otras muchas familias gomeras se La Villa dieron origen a otras muchas personalidades interesantes tanto cultural como socialmente
Amigo Roberto Padrón. Me gustan tus artículos sobre gomeros ilustres. Te hago algunas precisiones al de Jerez Veguero que no restan ningún valor a lo que refieres. Solo lo complementan.
ANDAMANA es el nombre de la logia. Era el de la esposa de Gumidafe en Tamarán, los que unificaron los guanartematos de la isla en uno solo que heredó Artemi Semidán.
Te pongo un enlace a los que formaban la Logia Andamana nº 4. Jerez Veguero figura encabezando la segunda columna. http://www.geocities.ws/depaca_sociedad/sociedad-masones-andamana.htm
Los campos de concentración según la Ley de Vagos y Maleantes los instaló finalmente el franquismo en Tefía, Fuerteventura, que encerró fundamentalmente a homosexuales.